Búster Keaton nace en 1895 en Kansas y fallece en 1966, en California, Estados Unidos. Destaca por realizar películas del género de la comedia. Sus padres estaban en una compañía ambulante llamada Mohawk Medicine, donde aprendería el oficio que posteriormente se apreciaría en sus obras. A diferencia de Charles Chaplin y su famoso personaje de Charlotte, Keaton destaca por ser más moderno que dicho autor y por ser más frío, es decir, apenas utiliza gesticulación, pero siempre saca una sonrisa al espectador.
Keaton destaca por su dimensión creativa y sobre todo por el cálculo en la realización de sus películas. Se ha caracterizado por meter gags en sus películas y utilizar planos que se basan en la profundidad de campo. Además tiene un alto mecanismo de presión desde el punto de vista de la dirección y el montaje, que encadena situaciones que guardan relación de causa y efecto, culminando así en una escena.
Empieza a trabajar como actor secundario y como productor, en 1917. Seis años después, dio el gran salto como director realizando doce largometrajes, los cuales le dieron la fama. Son obras donde desarrolla su personaje delgado y con gran sentido folletinesco, sobresaliendo por un sentido de construcción dramática donde va abandonando el gag.
En un principio sus argumentos en los filmes no son cómicos, pero poco a poco va alcanzando ese clímax de humor tan característico de Keaton. Por lo tanto comienza con situaciones nada cómicas, pero por una serie de encadenamientos su final se convierte en una gran comedia.
A partir de 1927 sus películas tuvieron éxito, pero no llegaron al nivel de las películas de Charles Chaplin. Tras introducirse años posteriores en la Royal Golden Mayer, se tiene que someter en la tiranía de los estudios, perdiendo así su propia libertad creativa. Toda esa serie de problemas, van a determinar la realización de siete largos, uno de ellos es “Estrellados. Siendo una obra que poco tienen que ver con las anteriores. Toda esta situación, desencadeno que los estudios le despidieran, empezando ha arruinarse y busca trabajo en Londres y Francia, sin ningún tipo de éxito. Un intento de volver a tener renombre, fue con la película “Cabalgata de Hollywood”, donde aparecen todos los cómicos de la época, pero tampoco encontró éxito.
Cabe destacar en los años 60, dos películas: “The rail rodder”, siendo un documental que consiguió el oso de oro, donde cuenta cómo realizó sus trabajos. El otro filme se trata de “Buster Keaton cabalga de nuevo”, siendo un nuevo intento de poder subir a la cumbre cinematográfica. En 1966 realiza su última película “Golfus de Roma”, donde tuvo total libertad para poder dirigir y crear a su antojo.
En definitiva, Buster Keaton pasa a la historia del cine por sus comedias. Siendo obras que comienzan mostrándonos una situación poco cómica, pero que su enlace es totalmente diferente al inicio. A diferencia de otros humoristas de la época, su semblante es serio y poco gesticuloso, hecho que da mayor dificultad para hacer reír al espectador. Por todo ello y por su forma de filmar, es uno de los grandes cómicos de la historia.
