Los fans de Modern Family, especialmente los que gusten de verla en Versión Original, están de enhorabuena, pues la serie ha estrenado el 23 de septiembre la séptima temporada en los EEUU y puede ser visionada mundialmente a través de distintas plataformas en Internet.
Se trata de una comedia de situación creada por Christopher Lloyd y Steven Levitan, que también la producen junto a 20Th Century Fox. La idea se les ocurrió a partir de diversas historias protagonizadas por sus propias familias, comenzó a emitirse el 23 de septiembre de 2009 en la cadena ABC y desde entonces lleva 144 capítulos con críticas positivas, además se ha convertido en una de las series más premiadas de la historia contando con 21 Premios Emmy, 1 Globo de Oro, 3 Premios VGA, 5 premios del sindicato de actores…
Como formato los creadores han escogido el falso documental, cada capítulo, de unos 22 minutos, comienza con los personajes contando su versión de algún hecho. Modern Family cuenta la historia de tres familias cuyo nexo de unión es el patriarca Jay Pritchett, interpretado por Ed O´Neill, casado en segundas nupcias con Gloria (Sofia Vergara) una colombiana de procedencia pobre mucho más joven que él, y a la que ayuda a criar a su hijo Manny (Rico Rodríguez II), empollón con problemas de integración. Juntos han tenido un bebé al que han llamado Joe (Pierce Wállace).
Por otro lado está Claire (Julie Bowen), que trabaja para su padre Jay en una fábrica de armarios y está casada con Phil (Ty Burrel) agente inmobiliario y papá guay de sus tres hijos. Haley (Sarah Hyland), la mayor muy preocupada por su estatus social, por la moda y los chicos y poco por los estudios. Alex (Ariel Winter), es la hija mediana, empollona y a veces casi transparente para su familia. Y Luke (Holan Gould) el colega de aventuras para Phil.
Mitchel es el otro hijo de Jay, interpretado por Jessy Tyler Ferguson, es un abogado gay casado con Cameron (Eric Seonestreet), juntos han adoptado a una niña china a la que han llamado Lily (Aubrey Anderson Emmons).
Gran parte del éxito de la serie estriba en sus actores, pero la manera de abordar el guión partiendo de tópicos a los que constantemente se les da la vuelta, es lo que la dota de una personalidad tan arrolladora y la llevan todo el tiempo a despertar la risa y la simpatía del espectador. Como ejemplo clave el papel de Jay, hombre tradicional, padre de familia, casado con una mujer mucho más joven y espectacular, que en un principio puede parecer que sólo lo quiere por su dinero. Jay tiene que lidiar con sus propios prejuicios todo el tiempo: con respecto a su edad que no le impiden ser padre de nuevo cuando ya tiene nietos mayores; su machismo que no le impide aceptar a su hija en su empresa; su hijo gay, hecho que le cuesta mucho aceptar; y su hijo “adoptivo” un empollón al que no le gustan los deportes…
Cada temporada de la serie se centra en un determinado hilo argumental, parece ser que en esta séptima temporada será la vida de Alex en la Universidad, y la historia amorosa frustrada de Haley y Andy. ¡Promete mucho!
Hola yo soy muy fan de esta serie, entre otras, y la llevo al día, La verdad que la serie no tiene nada y lo tiene todo.
El éxito, que creo que las familias son así, locas y que hay de todo.
besos