Diario del Cineasta

A por la segunda temporada de Sense8

Sense8

Desde el 5 de mayo tenemos el resto de la segunda temporada de Sense8 disponible en Netflix. Recordemos que antes pudimos ver el especial navideño.

Atención: Antes de continuar con esta crítica se recomienda haber visto la primera temporada y el especial navideño. De lo contrario habrá ciertos aspectos que se consideran spoilers para aquellos que no hayan visto los capítulos anteriores.

Como es habitual, dividiremos esta crítica en dos partes. Primero explicaremos el argumento de la segunda temporada de forma general, a partir de lo último que sabemos de los protagonistas. Y una segunda parte en la que se valorará la serie, una opinión.

Argumento

El grupo de sensantes del que forma parte los protagonistas, siguen aprendiendo de sí mismos y del funcionamiento de la conexiones entre ellos. Además de conocer a otros sensantes, tienen que ser cuidadosos para evitar que Whispers (Terrence Mann) les atrape.

Mientras Nomi (Jamie Clayton) y Amanita (Frema Agyeman) tratan de buscar información sobre qué son los sensates, Will (Brian J. Smith) y Ripley (Tuppence Middleton) buscan a Whispers para saber más de él y la organización para la que él trabaja.

En México sigue Lito (Miguel Ángel Silvestre) con Hernando (Alfonso Herrera) y Daniela (Erendira Ibarra) buscando compaginar su vida privada con su vida profesional, ya que desde que la prensa se enteraron de la relación de ellos la situación laboral se ha complicado. Y en Kenia, Capheus (Toby Onwumere) conoce a una periodista llamada Zakia con la parece que podría haber una relación.

Sun (Bae Doona) sigue en una cárcel de Seúl, pero parece que se va acostumbrando a esa situación, por lo que se hace llevadera la estancia.

Finalmente tenemos a Wolfgang (Max Riemelt) intentando mantener su relación con Kala (Tina Desai) y con otra mujer que aparece en su vida. A su vez, el alemán tiene que llevar un club con su amigo Felix (Max Mauff).

Crítica

La serie sigue mostrando el universo de los sensates. Esto puede hacer que aquellos que no hayan seguido la serie desde la primera temporada puedan sentirse perdido y desinteresados. En cambio, los que son seguidores agradecerán que la serie vaya evolucionando con la incorporación de nuevos personajes.

Además se sigue notando la tendencia a la multiculturalidad. Aparecen personajes de distinta procedencia y las ciudades que visitan los protagonistas no son los que se desarrolla la mayor parte de la trama. Este asunto es de destacar porque permite y permitirá que la serie siga expandiendo su historia.

La música es otra característica que también vale la pena destacar. Permite acompañar las escenas en las que se encuentran. Es evidente que tanto los productores como el equipo de música y sonorización han puesto empeño en la elección.

Del mismo modo que se comentó en la primera temporada, es inevitable mencionar que la serie incorpora mensajes políticos y sociales, lo cual en ocasiones pueden caer en el sinsentido. Aunque también hay que reconocer que algunos discursos, por ejemplo el que se puede escuchar en el primer episodio, tiene sentido y contenido.

Finalmente, un aspecto que ha muchos seguidores les está gustando es la cantidad de escenas de acción que a lo largo de la serie aparece. Esto, junto con las escenas sexuales, son los mayores atractivos que hace que aumente los seguidores a la misma.

En el tráiler se puede ver una parte de lo que Sense8 tiene preparado en la segunda temporada… y última, ya que de momento los responsables de Netflix han decidido cancelar la serie.

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